En cuanto el ciudadano sale de la pobreza empieza a querer libertad, que es algo inherente al ser humano (mientras no hagan ingeniería genética con nosotros inyectándonos genes en virus transmitidos por el aire, como la gripe, que nos vuelva “sumisos” ahí es jaque mate para la libertad)
Pero en cuanto la Unión Soviética cayó, el capitalismo que está basado en la libre competencia se corrompió y se volvió capitalismo oligopólico de los “amigos del gobierno” (desde las grandes empresas de finanzas hasta las grandes empresas farmacéuticas y de producción de armas)
Y eso no es capitalismo sino feudalismo económico donde los reyes (presidentes) nombran a sus lords (capitanes de industrias) quienes los apoyan economicamente para mantenerse en sus tronos de poder, y la clase media se va empobreciendo hasta que se termina en un capitalismo “populista” en que el gobierno se mantiene gracias a la dependencia de una gran parte de la población en regalos mensuales de dinero que el gobierno les hace y la gente los sigue votando para evitar la posibilidad de que les saquen el regalo que les permite sobrevivir.
¿La solución?
Ni comunismo, ni socialismo, ni populismo ni capitalismo oligopolico (pocas empresas super poderosas en lugar de muchas empresas mas pequeñas compitiendo todas contra todas para realmente dar el mejor servicio a la población al mejor precio posible y donde ninguna es tan grande como para poder “comprar” a los políticos).
Sino un capitalismo de honesta competencia basada en la educación de la gente, como en los países escandinavos.