Jesús estaba obsesionado con el tema del perdón y el no juzgamiento porque todo ideólogo (y sus ideologías) está contaminado por sus experiencias personales.
Así como Bert Hellinger (el creador de las constelaciones familiares y de los ordenes del amor) está obsesionado con el tema de la violación y el incesto y que hay que no solo perdonar sino honrar a los que te violan y a los padres incestuosos que han tenido sexo contigo (por algo se fue a los diez añitos de su hogar para siempre), Jesus vivió su niñez obsesionado por el tema de que si su padre no le hubiera creído a su madre que había sido embarazada “por un espíritu”, su madre hubiera sido matada, según la ley de esa época (2000 años atras) por fornicaria.
Y esa obsesión personal permeo toda su filosofía de “poner la otra mejilla”, “perdonar siempre” y “no juzgar para no ser juzgados”
GRAN ERROR.
Todo lo que exageras se va para el otro extremo por una ley de acción y reacción que no solo funciona a nivel materia sino también a nivel intelectual y espiritual y por lo tanto la Iglesia Cristiana ha caído en las mas crueles e injustas persecuciones y matanzas de los demás y ni siquiera mataba a los otros por sus pecados sino solo …. por no estar de acuerdo en la opinión sobre quien es o no Dios!!!
Todo lo bueno exagerado se torna en malo.
El perdón también.
Si te han vendido que cuanto mas perdón mejor, te han engañado y una mentira repetida mil veces se tiende a confundir con la verdad (ese era el lema de propaganda que manejo toda la actitud de los nazis en Alemania, repetir mil veces las mentiras hasta que la gente se las creyera)
El perdón ES bueno.
Libera. Sana.
El perdón exagerado ES MALO, como todo lo exagerado.
Y POR SUPUESTO que debes aprender a juzgar, todo el tiempo, a todo el mundo, a toda situacion, EMPEZANDO POR TI MISMO.
Aprender a juzgar implica a aprender a juzgar con inteligencia, con sentido común, con imparcialidad, con conciencia moral, aplicando la ley de que exiges para ti mismo eso que esperas de los demás.
La misericordia, la empatia y la compasión tienen su enorme importancia.
El juzgamiento y la condena TAMBIÉN. El mal, la mentira y la injusticia deben ser primero juzgados, luego condenados y luego combatidos.
No te dejes vender extremos que suenan bien y son todo MENOS crecimiento personal.