Es lo que hacen los psicopatas y los borderlines con pasmosa facilidad.
El perdón, para conseguirlo de forma genuina (de otros o de uno mismo) se gana con méritos, que son:
a) el genuino arrepentimiento por el daño causado a otros y por el daño causado a uno mismo (no sirve un arrepentimiento parcial, es nadar para morir ahogado en la orilla, como dice el dicho)
b) el reconocimiento de dicho arrepentimiento frente a las personas dañadas (y ellos juzgarán si el arrepentimiento es genuino o no, si no lo consideran tal, el arrepentimiento no fue tal sino auto inventado porque todos somos capaces de darnos cuenta si la persona que nos daño esta realmente arrepentida o no).
c) la compensación del daño generado (en toooodo lo que sea posible, a veces es difícil hacerlo 100% pero 52 % es mucho mejor que 7% o que nada).
A los que se perdonan a sí mismos sin transitar por a) b) y c) les termina yendo mal en la vida, más tarde o más temprano, porque aquí se hacen y aquí se pagan (y el precio y la forma de pago no la elige uno).
El perdón es algo muy importante para la salud mental.
Tanto mas podemos perdonar a otros sus daños hacia nosotros y tanto mas podemos perdonarnos a nosotros mismos los daños hacia otras personas y los daños a nosotros mismos, mas salud mental (y por lo tanto fisica tambien) tendremos.
Pero el falso perdon, que es todo perdon que se haya transitado sin a, b y c de arriba, no sirve para absolutamente nada, sino al reves, genera una cuenta pendiente que tarde o temprano explota y genera nuevos daños.