Es una palabra en inglés que se traduce como “adictos al trabajo”
Cuando hay cosas que no queres ni pensar, porque te duelen horrible al pensarlas o recordarlas, cuando no soportas la vida tal como es y tus acciones o rol en que participaste en ella, pasadas y/o presentes, o cuando el futuro que anticipas es demasiado doloroso de soportar en conciencia, necesitas evadirte.
Y uno se evade con las adicciones, sea a sustancias externas, como la cocaína, o a sustancias internamente segregadas como la adrenalina (deportes de riesgo) y endorfinas (adicción al deporte y/o al ejercicio) o estando tan ocupados que no tenes tiempo ni energía para “pensar” en tu propia vida (adicción a la TV u otros entretenimientos o el tema que nos ocupa en este posteo, adiccion al trabajo).
Lo unico que podemos decir a favor de la adiccion al trabajo es que te hace ganar dinero mientras que otras adicciones no, o mas aun, te hacen perder dinero.
Pero la base del workaholismo es la necesidad de “no pensar en serio” sobre la propia vida. Porque una persona inteligente trabaja para vivir, no vive para trabajar, si puede evitarlo (muchos no pueden, pero eso ya es otra historia y tiene que ver con política y economía y como usaron su juventud para prepararse para el mercado laboral, no con psicología y crecimiento personal, que tiene que ver con como manejas AHORA tu vida)
Diferente es aquellos que se dedican horas y horas y horas a su PASIÓN creativa. Eso no es trabajo, es vocación.
¿Cuando la dedicación excesiva a algo es workaholismo o es pasión creativa?
Ahi es donde se necesita el sentido común y honestidad intelectual para diferenciarlos y entender las propias motivaciones de por que hacemos lo que hacemos..
Puede ser 50 y 50%.
O 70 y 30%.
O 30 y 70%.
O 90 y 10%.
O 10 y 90%.
Lo importante es no confundir una pasion con una adiccion que se usa para no pensar y desconectar del mundo interior.
Desconectar de tu mundo interior te robotiza y deshumaniza.
Y es lo opuesto al crecimiento personal.