Cuando dos personas con mucho crecimiento personal se encuentran, el efecto que se genera en las charlas es como estar haciendo, ambos, terapia con el mejor terapeuta del mundo, solo que ademas multiplicado por diez.
Porque la otra persona sabe tanto como el mejor terapeuta del mundo y porque ademas no te cobra por ello y por lo tanto sientes el amor en la puesta de energía del otro/a en tu sanación y evolución (y cuando digo amor, me refiero al sabor del amor mas elevado, el amor universal, no el romántico, el que busca el bien de quien el Universo ponga en tu camino o sientas que tienes algo para darle porque si, por el placer de dar)
Y lo que “sana” las heridas, fue, es y sera siempre la VERDAD y el AMOR