Dice el dicho muy cierto que “podes hacer lo que tengas ganas de hacer pero no podes evitar las consecuencias de eso que haces”
Los “borderlines” (trastorno limite de la personalidad) viven cerca del “borde” entre …
a) ser “gente normal con problemas psicológicos a resolver, como todo el mundo tiene” y
b) pasar del borde hacia el lado de la “locura”, o sea, hacia el invento de su propia realidad, donde se miente a si mismo/a y se distorsiona la realidad sobre su pareja, su jefe, su amigo, si mismo, lo que sea, y se cree totalmente esa distorsión e invento.
Y ahi, cuando pasa del borde (en episodios que a veces le duran días, a veces semanas, a veces meses) actúa en función de esa realidad que se inventa.
Y ahí vienen las consecuencias, siempre perjudiciales cuando lo que se hace no es en función de la realidad sino del invento de la realidad.
Como todo tipo de trastorno, la gente que los padece los padece en determinado “grado”.
Normal totalmente normal no hay nadie en este planeta.
Todos tenemos “algo” de todo tipo de patologías mentales, solo que para poder poner la etiqueta de una patología sobre alguien, el nivel tiene que pasar de determinado umbral.
Y pasado ese umbral, hay múltiples grados de profundidad en que la patología puede manifestarse.
Por eso, mas que ocuparnos de si tenemos o no una etiqueta de un trastorno, lo útil es aprender de cada trastorno lo que NO hacer en nuestras vidas.
Y aquí las enseñanzas son
1) la mente humana es capaz de hacerse trampas al solitario e inventar la realidad, distorsionando los hechos a medida de lo que deseamos creer.
2) cuando actuamos en función de una realidad inventada o distorsionada, las consecuencias de nuestras decisiones y actos van a traernos un costo desagradable de pagar.
3) no conviene actuar bajo “impulsos” porque muchas veces esos impulsos están basados en una emoción, y tanto mas se activa nuestro cerebro emocional, mas se desactiva nuestro cerebro racional, que es el que puede calcular las consecuencias futuras mas probables de nuestros actos presentes.