Si no sabes bien, pero bien bien, estas dos cosas, entrar en una relación de pareja con compromiso (como ser casarte, o tener hijos, o tener bienes en común) es totalmente irresponsable, hacia la otra persona y hacia ti mismo/a.
No es “sentimos atracción mutua, juntamos nuestras vidas y después vemos que hacemos”.
No es “nos queremos eso es todo lo que importa” eso es de Disney y es mentira: con el amor (o peor, con supuesto amor que no es más que mero enamoramiento y atracción mutua que en general está basada en subpersonajes inconscientes en una y otra persona que se juntan para jugar una asignatura pendiente) no basta.
Para que una relación de pareja tenga razonables probabilidades de éxito ambos deben conocerse bien a sí mismos, ambos deben haber identificado a su o sus principales subpersonajes autosaboteantes y haberlos neutralizado con conciencia y libre albedrío y ambos deben tener claro sus valores (que valoran más que cual otra cosa, o sea que están dispuestos a sacrificar para conseguir cual otra cosa más importante) y si los valores (objetivos de vida) coinciden y ambos han salido ya de las hipnosis de la compulsión a la repetición de sus heridas de la niñez recién ahí podes de forma responsable comprometerte (e involucrar a otra persona) casándote, o teniendo hijos (que es muuuucho más compromiso que una libreta de matrimonio) o teniendo bienes en común.