Mi posición frente al LGBT

LGBT es la sigla del movimiento que nuclea a las lesbianas, gays, bisexuales y transexuales.
Primero separo a la B de las otras tres iniciales.
Creo que la bisexualidad es la condición natural del ser humano, no creo que haya alguien heterosexual al 100 – 0 % o 0 – 100 % sino que todos estamos en algún punto intermedio de bisexualidad, asi sea un 2% y “aprendemos” a identificarnos con una de las dos “identidades sexuales” durante nuestra formación, reprimiendo el porcentaje que tengamos de la identificación opuesta.
No creo, sin embargo, que uno nazca ni lesbiana ni gay (que justamente es 100 – 0%) ni transexual.
Creo que una gran parte de las causas que llevan a una persona a ser lesbiana (o sea que no quiere saber nada con los hombres) o gay (o sea que no quiere saber nada con las mujeres) o transexual, se derivan de problemas psicológicos y emocionales vividos en relación a la crianza, quizás desde el mismo periodo del embarazo y ciertamente desde el primer día del nacimiento.
Y así como un abuso sexual temprano sexual marca muchas veces “de por vida” a la persona, no importa cuanta terapia haga, esas causas psicológicas y emocionales que empujan a la persona a ser lesbiana, gay o transexual son tan fuertes y tan tempranas en la vida, que se transforman en parte de la psique de la persona y la persona bien puede sentir que “nació así”.
Con respecto a los heterosexuales que sienten afinidad por las personas dentro del colectivo LGBT, mi opinion es que estas personas sienten, consciente o inconscientemente, que tambien están como “presos” de daños profundos que sufrieron en la niñez que influyeron luego en su vida de pareja y forma de encarar la sexualidad, y eso los lleva a una natural solidaridad con las personas que se incluyen en el LGBT” porque se sienten identificados con el mismo tipo de situacion.
Por ejemplo, las personas que están presas de un trauma de infidelidad por el efecto de los daños sufridos en la niñez por la infidelidad percibida en alguno de sus padres, muchas veces no pueden escapar de esa compulsión a la infidelidad, como actores, siendo infieles, o como victimas, reclutando infieles, y saben muy bien que es tener una sexualidad manejada, como actor o como victima, desde el trauma psicológico o emocional.
.
Yo apoyo la LIBERTAD DE ELECCIÓN de la propia vida para todo el mundo, (incluyendo el derecho al matrimonio gay y que adopten hijos) pero no el proselitismo de la patología emocional, y cuando veo en el mundo una especie de tendencia a “normalizar” la percepción de lesbianas gays y transexuales como simplemente “una opción mas”, siento lo mismo que si hubiera una campaña por “normalizar” la tendencia a la infidelidad o cualquier otra actitud relacionada al sexo que esté fuertemente marcada por los traumas emocionales que sufren las personas.
Porque si tengo razón en lo que pienso al respecto, y los traumas vividos desde el inicio de la vida tienen que ver con la identificación posterior de la propia sexualidad como lesbiana, gay o transexual, entonces NO HUBO libre elección de la identificación sexual, porque nadie “elige” ser blanco de algún tipo de abuso o trato o influencia que lo empuje a uno, desde la primera infancia, a elegir ese rol disociado de la propia biología.

Para ver el posteo original con los comentarios en Facebook hacer click en el siguiente link: https://www.facebook.com/roberto.lazar.5/posts/10210893076303896

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *