Todo lo bueno, exagerado, es malo.
La sal le da sabor a la comida pero si le pones el doble de sal que lleva le arruinas el sabor. Y si le pones el triple directamente te queda incomible aunque todo el resto de los ingredientes (de la educación de tu hijo) hayan sido adecuados.
Con la protección que le das a tus hijos es lo mismo.
Si le falta sal, queda desabrida la comida y tu hijo no se sentirá querido porque no le has dado la DOSIS adecuada de protección. Y si no se siente querido por su padre y madre luego buscará relaciones de pareja donde TAMPOCO será bien querido y cuidado y protegido con lo que le arruinas su vida afectiva (a menos que haga terapia eficiente y te ponga donde debes estar, en la carpeta de mal padre/madre) y se de cuenta que no es cierto que “madre hay una sola” y “nadie te va a querer mas que tu madre o padre” y bla bla bla y se de cuenta que TIENE derecho a recibir mucho mas de lo que tu le diste como su padre o madre.
Pero cuando te PASAS DE DOSIS el mensaje que le das es “tu no eres capaz de cuidar de ti mismo/a por eso tengo que estar encima tuyo para que no te pase nada”.
Y asi destruyes mucho mas que su vida afectiva, destruyes su capacidad de sentirse capaz para enfrentar la vida por si mismo/a.
Y lo transformas en una persona emocionalmente dependiente, lo cual es una patología psiquiátrica (que TAMBIÉN se cura con terapia y a veces lleva largo tiempo en sanar)
Como todo en la vida, debemos aprender la DOSIS adecuada de cualquier cosa que hagamos, lo cual requiere el menos común de los sentidos, el sentido común (o un buen asesoramiento de alguien que lo tenga).
La sobreprotección hacia tu hijo/a le hace mucho daño
Para ver el posteo original con los comentarios en Facebook hacer click en el siguiente link: https://www.facebook.com/roberto.lazar.5/posts/10206393086366960