Hay hombres que nunca maduraron.
Cuando crecen estos hombres fallidos en su maduración no cumplen bien (no saben, son chicos grandes) ni la función de esposo ni la función de padre, sino que funcionan como otro hijo mas de la mujer con la que se casan y como el “hermano mayor” de los otros hijos de la pareja, que juega con los otros hijos, los “cuida” en ausencia de la madre.
Para ser padre PADRE:
1) tenes que saber ganar el dinero necesario para mantener a tu familia por lo menos al 60% de los gastos de la familia (dado que la mujer va a tener que cuidar de los hijos cuando son muy chicos lo cual resiente su capacidad de ganar dinero para aportar a la familia)
2) tenes que saber guiar a tus hijos en valores de vida (se enseña con el ejemplo mas que con las palabras)
3) tenes que saber hacer sentir “protegidos” a tus hijos (un hombre inmaduro jamas lo logra)
Los hombres que no han madurado y tienen hijos les hacen un gran daño a sus hijos, porque esos hijos creen que ESO que tienen como padre es “ser un padre”, cuando no lo es, y por lo tanto no pueden elaborar que son básicamente huérfanos de padre con padre vivo, y salen a la vida de adultos con los mapas errados sobre de que se trata ser un padre, repitiendo, en muchos casos, el mismo patrón no constructivo cuando a su vez tengan hijos.