Idealmente todos tenemos derecho a tener un muy buen padre y una muy buena madre.
Y si no es asi, al menos un padre sin defectos descalificatorios y una madre sin defectos descalificatorios.
Lamentablemente para muchos esto no es el caso.
Supongamos que tuvieramos un padrometro y un madrometro que indica cuan buen o mal padre o madre es una persona.
Supongamos que de 95 a 100 es sobresaliente, que de 30 a 40 es mal padre o madre y que menos de 30 es “insuficiente, muuuy malo” y que menos de 20 es “pesimo” y menos de 10 es “pierde la patria potestad por tener defectos descalificatorios”.
¿Que pasa si el padre es 25 y la madre es 40? O visceversa?
Pasa que en realidad ambos son malos y aun menos que el padre o madre promedio del planeta (ni hablar que es mucho menos que un padre o madre realmente buenos) pero el niño eso no lo sabe porque no conoce del mundo, solo conoce a su familia y su familia es el mundo, para el/ella.
De modo que toma al 25 como el progenitor malo y al 40 como el progenitor bueno.
Y ahi si que está jodido cuando salga a la vida de adulto/a si no cae en manos de alguien que le pueda abrir los ojos en terapia.
Porque “si uno cree que no puede, no puede” y “si uno cree que no existe, no lo registra”.
Como continuamente estamos bombardeados con frases como “nade te va a querer mas que tu propia madre” o “madre hay una sola” y como el niño instintivamente necesita creer que sus padres lo quieren y lo van por lo tanto a cuidar y proteger (porque de lo contrario el miedo a la vulnerabilidad lo psicotizaria), termina creyendo que “40” es lo maximo de amor y cuidados que puede y merece recibir.
Y si sale con esa creencia al mundo, directamente no va a registrar ni aceptar amores mejores que 40, sino de 40 para abajo, lo cual lo condena a vivir en malas relaciones de pareja.
La labor del terapeuta, ahi, es explicarle que su familia NO ERA el mundo, solo le PARECIA al niño que es asi y que NO ES CIERTO que los padres quieren a sus hijos, y los saben cuidar bien y proteger bien del daño, algunos si y otros no, en una escala en que todos caen en algun punto intermedio entre el 0 y el 100.
Y que si tuvieron la mala suerte de tener ambos padres menos que 50, ya bastante sufrieron en la vida con esa mala suerte como para seguir jodiendose la vida con falsas creencias resultantes de esa niñez disfuncional, que en su momento no sabian que era una niñez disfuncional porque es la única que conocieron por aaaaños, pero que existen en el mundo millones de personas que son mas que 40 en su calidad humana y su capacidad de amar constructivamente, por lo cual dejen de justificar el “modelo familiar” y asuman que tienen derecho a ser queridos, cuidados, respetados y felices.
Posdata: entender el concepto de este posteo sirve tambien cuando uno tuvo un buen padre o madre 60. Porque el mecanismo de creer que entonces 60 es lo maximo que hay le quita a uno la posibilidad de relacionarse afectivamente con 70, 80 y 90 si uno pretende seguir justificando la muchas veces falsa creencia de que “nadie me va a querer y cuidar y apoyar mejor que mis propios padres”