El único amor incondicional donde se da más de lo que se recibe y está BIEN que eso pase es en el amor de los padres hacia los hijos.
En las relaciones de amistad y de pareja, para no configurar una relación de “uso”, el dar y el recibir deben estar equilibrados.
¿Dar y recibir que?
Fíjate en los tres dibujos adjuntos, esquema de relación 1, esquema de relación 2 y esquema de relación 3.
Ahi representamos el “valor” de ambas personas que están en relación, la persona A y la persona B, por el tamaño del rectángulo que la representa.
En los dibujos adjuntos, si la persona A vale menos que la persona B (o siente que vale menos por falta de autoestima) el tamaño de su rectángulo se dibuja más chico.
Si la persona B cree que la persona A no tiene suficiente valor como para que B quiera tener sexo o formar pareja o ser amigo/a de A, B va a esperar que A agregue en su platillo de la balanza “algo” que sumado a su valor como persona en si y sus atributos personales, equivalga al valor de B.
Uno de esos “algo” (no el único) que A puede sumar al platillo de la balanza para equilibrar su menor “valor” como persona atractiva al otro como tal, puede ser dinero.
Este caso está representado en el esquema de relación 2.
Es el caso de la mujer que le dice directa o indirectamente a un hombre “por lo que considero que vales tu como persona, en mi escala de valores y gustos, no iría a la cama contigo (o no sería pareja tuya), pero si me pagas o me pagas algunas cuentas o me haces regalos ahí si contá conmigo para ser tu pareja sexual”.
Es el caso de la jovencita que sale con el veterano solo si el veterano la mantiene, en donde está implícito el mensaje “por ti mismo jamas saldría contigo, salgo solo porque compensas con algo más, en este caso, dinero” y en relaciones puntuales de un rato, es el caso de la escort o de la prostituta.
En el dibujo del esquema de relación 1 también A pone dinero en su platillo de la balanza (además de ponerse a sí mismo/a) pero la relación es sana y de respeto mutuo porque B da a cambio algo que aqui llamo la “contra prestación” pero vos ponele el nombre que quieras, lo importante no son los nombres sino los conceptos.
En esas relaciones sanas ambos se dicen sin necesidad de palabras que el valor y atractivo de A y el valor y atractivo de B en tanto personas es el mismo, y nadie es superior ni mejor que nadie por lo tanto lo que uno agrega por un lado se compensa con lo que el otro agrega por su lado en SU platillo de la balanza.
Un ejemplo de este tipo de relación sana en el sentido del respeto al valor de la persona en si son los matrimonios tradicionales que eran la norma general durante siglos y hasta hace no tanto, en que el hombre ponía todo el trabajo y el gasto de energía en traer el dinero al hogar, pero la mujer por su lado tenía la no menos desgastante tarea de:
a) cuidar de los hijos
b) transformar la casa en un hogar (lo cual daba muuuucho trabajo y requería mucha energía, en época en que no había electrodomésticos ni comidas prepreparadas en el supermercado y aún hoy da trabajo)
c) cuidar del marido (el rol femenino del “reposo del guerrero” en la escena tradicional en que el marido llega a casa fundido del trabajo pero la amorosa esposa lo espera con las pantuflas y el vaso de whisky).
Ese modelo de relación de pareja tuvo problemas por OTRO motivo y fue el abuso del poder económico por parte de los hombres (la independencia económica es importante para evitar abusos a partir de tener la manija económica en la relación)
Para que una relación sea sana y le dé a sus participantes el mensaje de que “tu, por ti mismo/a sos TAN valioso/a como yo, ni más ni menos” el dar y recibir, deben ser parejos, o sea el valor agregado de lo que uno y otro ponen en la relación, aparte de ponerse a si mismos, deben valer lo mismo (no hay un valorometro para esto, se usa el sentido común para saber valorar lo que uno y otro ponen en la relación aparte de si mismos y cuanto vale eso).
Eso de “si me ama me va a dar todo sin esperar nada a cambio, o sin esperar algo de similar valor a cambio” es simple bla bla bla para disimular una relación de explotación personal basada, en general o en psicopatia o mas comunmente en personas que creen que la vida tiene una especie de cuenta corriente y que si su mamá o su papá no le dieron lo que era su derecho recibir, entonces “la vida se los debe” y pretenden que la pareja de uno les “compense la cuenta corriente” haciendoles de mama o de papa (o sea dando mas que recibiendo)
Y obviamente vos NO LE DEBES NADA ni tenes por que pagar los platos rotos por que su madre o padre no cumplieron bien su rol.
Este dar más de lo que se recibe le pasa a muchas mujeres que se desloman en sus trabajos a la par de sus maridos ganando parecido a lo que ganan ellos pero ADEMÁS tienen sobre si la carga de cuidar de los hijos y de la casa. Y es por eso que son muchas más las mujeres que piden el divorcio que los hombres. Para sentirse explotadas prefieren estar solas y con eso recuperar la autoestima evitando el mensaje descalificador “tú vales menos que yo y por eso tienes que contribuir más que yo en esta relación”.
Y les pasa a muchos hombres con falta de autoestima (siempre relacionados a no haber recibido suficiente amor de su madre) que sienten que su valor es mas chico de lo que realmente es y por lo tanto se dejan abusar económicamente por sus parejas en una relación del tipo esquema 2 “como si” el valor B fuese mayor que el valor A de ellos cuando en realidad no es asi, solo lo sienten asi porque “si mi mamá no me quiso lo suficiente debe ser porque no valgo mucho” (es su falsa creencia, para lo cual existe la terapia para extirparla).
Las relaciones del esquema 3 son igualmente explotadoras de A.
Porque está implícita la descalificacion del valor de A como persona (si A tiene que poner más en la balanza que B es porque A vale menos que B como persona)