Es cierto que el que empieza a estudiar de que se trata la vida de los seres humanos termina descubriendo que “esto” funciona como si fuera una escuela, lección que no aprendiste repites y repites y repites, asi cambias de persona, de escenario, de pais, de lo que sea.
Pero esta escuela de la vida también tiene “recreos” entre clases, metaforicamente hablando, por lo cual no es solo aprendizaje sino también gozo.
¿Cuales gozos hay?
Los del cuerpo, los intelectuales de la mente, los emocionales de la mente y los del alma.
Ejemplos personales (cada cual tiene los suyos):
Cuando Leticia me hace una hora de mimos y masajes gozo corporalmente.
Cuando estudio y aprendo algo nuevo, gozo mentalmente de forma intelectual. Cuando resuelvo un problema intelectual (como cuando estaba escribiendo mis libros sobre neurociencia y había cosas que los libros no explicaban porque todavía no se entendía como pasaba y yo reflexionando llegue a descubrir la solución, es como a nivel diario uno siente que resolvió un crucigrama, hay un placer intelectual en ello).
Cuando me pongo a los teclados y toco y canto canciones gozo mentalmente a nivel emocional porque es una “catarsis expresiva” de mis emociones. Cuando siento que amo y soy amado, cuando veo a un hijo feliz, gozo emocionalmente también.
Cuando observo algo bello y mas todavía cuando creo algo bello, cuando hago algo bueno por alguien, cuando me alineo con mi esencia y siento que estoy autorrealizando mis potenciales, mi alma goza porque estoy haciendo lo que vine a hacer.