Un automóvil con motor a nafta necesita aceite para lubricar el mecanismo.
Si le falta el aceite primero recalienta y luego eventualmente se funde el motor.
Un ser humano necesita conexiones humanas profundas y amorosas y comprometidas para “lubricarse” y funcionar bien en el corto medio y largo plazo.
Si le faltan conexiones humanas profundas y amorosas y comprometidas se recalienta (sufre) su corazón y luego, su mente y eventualmente “funde motor”.
En la etapa de sufrimiento que es el equivalente al periodo en que el motor esta recalentando por falta de aceite, así como el conductor que se pasa reponiendo el agua en el radiador porque este calienta tanto que evapora el agua que contiene, el que sufre por falta del lubricante humano del amor (que solo se consigue en las relaciones profundas y comprometidas), intenta compensar su “radiador” (ultima defensa para que no se funda el motor) con ADICCIONES de algún tipo, que sirven para evadirnos por un rato del dolor de la falta de suficiente amor en nuestras vidas.
Y por que?
Vivimos en un mundo donde cada vez mas “amamos a ciertos objetos favoritos (autos, ropa, celulares con internet, etc) y usamos a las personas (incluyendo parejas y amistades)”.
O sea el mundo al revés.
Si uno vive en un mundo donde piensa que los demás lo van a usar, si pueden, se pone a la defensiva que es lo opuesto a la actitud necesaria para aceitar el corazón humano con relaciones profundas y amorosas y comprometidas.
Se vuelve resentida y desconfiada, y empieza a ser parte del problema.
En definitiva esto solo tiene salida con una revolución absoluta de la forma de vivir. La alternativa es una epidemia cada vez mas creciente de adicciones (evasión de la dolorosa realidad) cuyo final previsible es la fundida del motor colectivo (la caída del sistema).
Nuestra “lucha contra las drogas” es inutil porque le erra al diagnostico, el problema no son las drogas sino la falta cada vez mayor del necesario lubricante humano.
Posdata: esa revolución de la que hablo arriba no la vamos a hacer, lamentablemente, por las buenas.
Pero tengo la esperanza de que los sobrevivientes de la tercera guerra mundial lo hagan.
Mis primeros 20 años de estudios y escritura los hice pensando en como evitar la tercera guerra mundial a traves de ayudar a la gente a crecer y tomar conciencia.
Los ultimos 10 años de estudios y escritura los hice pensando en como contribuir para edificar algo nuevo que funcione BIEN, luego que todo esto actual caiga, post tercera guerra mundial, que generará en los sobrevivientes un “shock emocional” que servira para lo mismo que sirve el electroshock en los deprimidos que no responden a la terapia: para destrancar patrones mentales firmemente instalados que son nocivos.
Posdata: hasta las ratas necesitan vivir una vida adecuada para evitar volverse adictas (por si te interesa el tema te adjunto el link)
http://astillasderealidad.blogspot.com.uy/2016/11/la-adiccion-las-drogas-tiene-una-causa.html