Reproduzco parcialmente un articulo de Perez Reverte
ES LA GUERRA SANTA, IDIOTAS
Las diversas primaveras árabes, al final resultaron ser preludios de muy negros inviernos.
Inviernos que eran de esperar, por otra parte, cuando las palabras libertad y democracia, conceptos occidentales que nuestra ignorancia nos hace creer exportables por las buenas, fiadas a la bondad del corazón humano, acaban siendo administradas por curas, imanes, sacerdotes o como queramos llamarlos, fanáticos con turbante o sin él, que tarde o temprano hacen verdad de nuevo, entre sus también fanáticos feligreses, lo que escribió el barón Holbach en el siglo XVIII: «Cuando los hombres creen no temer más que a su dios, no se detienen en general ante nada».
Porque es la Yihad, idiotas.
Es la guerra santa.
Lo sabe quien haya leído Historia, o sea capaz de encarar los periódicos y la tele con lucidez.
Lo sabe quien busque en Internet los miles de vídeos y fotografías de ejecuciones, de cabezas cortadas, de críos mostrando sonrientes a los degollados por sus padres, de mujeres y niños violados por infieles al Islam, de adúlteras lapidadas -cómo callan en eso las ultrafeministas, tan sensibles para otras chorradas-, de criminales cortando cuellos en vivo mientras gritan «Alá Ajbar» y docenas de espectadores lo graban con sus putos teléfonos móviles.
Lo sabe quien lea las pancartas que un niño musulmán -no en Iraq, sino en Australia- exhibe con el texto: «Degollad a quien insulte al Profeta».
Lo sabe quien vea la pancarta exhibida por un joven estudiante musulmán -no en Damasco, sino en Londres- donde advierte: «usaremos vuestra democracia para destruir vuestra democracia».
A Occidente, a Europa, le costó siglos de sufrimiento alcanzar la libertad de la que hoy goza.
Poder ser adúltera sin que te lapiden, o blasfemar sin que te quemen o que te cuelguen de una grúa.
Ponerte falda corta sin que te llamen puta.
Gozamos las ventajas de esa lucha, ganada tras muchos combates contra nuestros propios fanatismos, en la que demasiada gente buena perdió la vida: combates que Occidente libró cuando era joven y aún tenía fe.
Pero ahora los jóvenes son otros: el niño de la pancarta, el cortador de cabezas, el fanático dispuesto a llevarse por delante a treinta infieles e ir al Paraíso.
En términos históricos, ellos son los nuevos bárbaros.
Europa, donde nació la libertad, es vieja, demagoga y cobarde; mientras que el Islam radical es joven, valiente, y tiene hambre, desesperación, y los cojones, ellos y ellas, muy puestos en su sitio.
Dar mala imagen en Youtube les importa un rábano: al contrario, es otra arma en su guerra.
Trabajan con su dios en una mano y el terror en la otra, para su propia clientela.
Para un Islam que podría ser pacífico y liberal, que a menudo lo desea, pero que nunca puede lograrlo del todo, atrapado en sus propias contradicciones socioteológicas.
Creer que eso se soluciona negociando o mirando a otra parte, es mucho más que una inmensa gilipollez. Es un suicidio.
Vean Internet, insisto, y díganme qué diablos vamos a negociar.
Y con quién.
Es una guerra, y no hay otra que afrontarla.
Asumirla sin complejos.
Porque el frente de combate no está sólo allí, al otro lado del televisor, sino también aquí. En el corazón mismo de Roma.
Porque -creo que lo escribí hace tiempo, aunque igual no fui yo- es contradictorio, peligroso, y hasta imposible, disfrutar de las ventajas de ser romano y al mismo tiempo aplaudir a los bárbaros.
A LO CUAL LE AGREGO YO:
La civilización romana occidental sucumbió a los bárbaros invasores hace 1600 años porque al igual que a los europeos hoy, les faltó el instinto de supervivencia.
Así como los viejos a veces se dejan morir porque ya no le encuentran un sentido a la vida, las civilizaciones viejas se dejan morir cuando pierden el sentido de sus valores y se vuelven decrépitas..
El mundo occidental recién se desayuna en los últimos 2 años de lo que significa el Islam radical. Pero ese mismo islam radical, con la excusa de luchar por los palestinos, es quien esta tratando de borrar a Israel del mapa hace 67 años en 4 guerras solo porque representa los valores occidentales y esta geográficamente metida dentro del mundo de países islámicos.
No asesinaron, degollaron, violaron y esclavizaron a todos los judíos de Israel (como estan haciendo en Siria e Iraq y Sudan hoy) solo porque no pudieron, porque perdieron las 4 guerras iniciadas por ellos contra Israel (1948, 1956, 1967 y 1973). Los palestinos les importan tres carajos al mundo islámico.
La prueba es que hubieran podido asimilarlos en su seno como hizo Israel con los 700 mil refugiados judíos que tuvieron que huir en la misma época de los paises árabes e islámicos pero no, los mantienen hace 3 generaciones en campos de refugiados solo para tener una excusa para pelear contra la punta de lanza del occidente (Israel) y sus valores de democracia e igualdad de derecho para las mujeres y las minorías que son anatema para el islam radical.
El mundo miró para un costado mientras los atacados eran judíos durante décadas.
Ahora siguen mirando para el costado cuando los atacados son los cristianos en el mundo árabe.
Veamos para donde van a mirar cuando le toque a Europa el turno de ser el blanco del terrorismo, no ocasional sino sistemático, como le ha tocado a Israel durante 67 años.
Posdata: podes leer el articulo original de Perez Reverte en
http://www.perezreverte.com/articulo/patentes-corso/938/es-la-guerra-santa-idiotas/