Hace unos minutos recibí este mensaje por privado (oculto el nombre de la persona porque le pregunté si podía poner su mensaje con su nombre y me dijo que prefería que no).
“Hola Roberto. De más está decir que me fascinan tus artículos. Y con el tema borderline, gracias al leerte, pude entender una anterior relación: ella era borderline.
Sabés lo preocupante? (por que yo terminé lastimado pero no le doy mucha vuelta al asunto, comprendo que la lágrima no me lleva a ningún lado, relfexiono, saco lo que me sirve, limpio lo que no, y sigo) es que ella ahora se dedica a “psicoterapia y otras yerbas”, y algo que me llamó muchisimo la atención en su momento es que ella “incitaba” a la gran mayoría de sus pacientes mujeres a dejar a sus parejas, matrimonios de años incluso. No veo que esto en sí sea malo si se requiere realmente, pero viniendo de alguien con personalidad borderline que atiende a personas me parece tremendamente violento.
Bueno, perdón si te robe tu tiempo, desde ya gracias por lo que hacés siempre y te mando un cálido abrazo a la distancia”
Mi lector pone el dedo en un tema real.
Teoricamente un/a terapeuta ha trabajado sus propios demonios, los ha superado, y por lo tanto conoce el camino como para señalarle a sus consultantes como hacer para superar los suyos.
En la práctica esto no sucede.
En USA te obligan a hacer mas de mil horas de terapia supervisada antes de darte el titulo para que puedas ser psicoterapeuta. y ADEMAS tenes que terminar tu propia psicoterapia (vos como paciente) antes de tener el titulo para atender a otros.
Pero en muchos otros países, el mio incluido, te recibís de psicólogo, y ZAS se supone que estas capacitado para atender consultantes. Y no necesitas hacer tu propia psicoterapia para pasarte en limpio para que te dejen atender personas.
Como el ser humano tiende a tratar de justificar sus propias carencias con las carencias de los demás (mal de muchos consuelo de ….) se da la triste situacion que mi lector me manifiesta en el mensaje que me mandó hoy que figura al principio del posteo.