He tenido mas de una conversación con lectores, referidos a este tema, preguntándome que opinaba.
Y lo que opino es que la experimentación sexual en la que intervienen terceras y cuartas o mas personas no es para todos.
Se requiere (aparte de las ganas de incursionar en el tema)
1) total honestidad con uno mismo lo cual requiere saber escuchar las voces de los subpersonajes internos y
2) total honestidad entre la pareja sobre las verdaderas motivaciones.
1) El error usual que cometen los swingers es ignorar que dentro de la psique humana existen subpersonajes que buscan cosas diferentes y a veces contradictorias, o sea, uno puede tener por un lado un subpersonaje que se excita viendo a su pareja con otra persona y al MISMO TIEMPO, tener un subpersonaje que se pone celoso de ese mismo hecho o que piensa “si me quisiera realmente no haría esto”.
¿Como?
¿Puede uno querer una cosa y también molestarse por eso mismo que uno quiere?
Obvio que si.
Y eso no significa que uno esté loco sino que es normal.
Pero la mayoría de la gente no sabe esto de los subpersonajes y como funcionan, y por lo tanto cuando decide hacer algo porque realmente siente que lo quiere, cuando surge dentro de si una voz que protesta contra eso, para no “sentirse incoherente” lo que hace es reprimir esa otra voz, reprimir a ese otro subpersonaje. Y es ahí donde empiezan los problemas. Porque la represión no implica hacer desaparecer a un subpersonaje, implica solo sacarlo de la conciencia. dejar de verlo, hacer que opere desde el inconsciente, fuera de la conciencia. Y en cada oportunidad que el subpersonaje que se “molesta” con la experiencia swinger sufre una nueva molestia, junta un nuevo “cupón de rabia” (al que uno no conscientiza, porque reprimió al subpersonaje) que, cuando se han juntado suficientes cupones y se “llena el album”, se termina canjeando por una infidelidad, o una gran pelea y hasta un divorcio, quedando la persona convencida de que el enojo que siente por el “tema que llevo al divorcio” es tal y tal cuando en realidad si no fuera por el álbum lleno el problema t al y tal se hubiera podido solucionar, pero se “saco presión de la olla de presión del enojo reprimido” usando la excusa del problema tal y tal y haciendo que ese problema se constituya en problema terminal de la pareja (y si se canjea el album por una infidelidad, en general eso es el virus que empieza a infectar la relación y termina mas adelante en una relación enferma o con la muerte de la relación)
¿Antidoto?
Entender el punto que es perfectamente sano y normal querer algo y también lo contrario, erotizarse con algo y tambien molestarse con ello. Cuando uno ESCUCHA a su mundo interno, los subpersonajes no juntan cupones, se pueden expresar, ex + presar = ex + presion siendo “ex” el termino que implica que había (presión) y ya no la hay mas.
Y si la fuerza de la molestia del subpersonaje celoso, o como lo quieras llamar, es grande, mi recomendacion es dejar el morbo para el terreno de la fantasía.
2) Cuando una pareja me consulta sobre que opino de que hagan intercambio de parejas les pregunto: ¿harían también un trío, ejemplo con un tercero y con una tercera?
Si la respuesta es “no”, para cualquiera de esas opciones de tríos, mi recomendación es “no hagan intercambio”, porque en realidad no les erotiza de por si que su pareja este con otra persona y con ellos sino que están “usando como moneda de pago” el darle libertad sexual a la pareja para tenerla uno mismo y eso NO ES un objetivo constructivo para la relación de pareja, uno no debe usar a su pareja como moneda de pago de absolutamente nada en la vida.
Si le pregunto al hombre de la pareja “¿te erotizaria un trio con tu mujer y otro hombre”? y la respuesta es “no”, entonces aun si no se lo dice a su mujer, la mujer va a saber que la respuesta seria un “no” y entonces, se va a preguntar la mujer, porque mi marido o novio me propone hacer un intercambio en el cual yo voy a estar con otro hombre? Lo hace para poder estar con otra mujer que le guste. O sea me usa como moneda de pago, me “entrega”, solo para poder acostarse con otras mujeres, no porque le erotice la situacion en todos sus aspectos. Y eso OBVIAMENTE junta cupones de malestar y hasta rabia en la mujer, conscientemente o no, hasta que se llena el album.
Pongo el caso de un hombre porque es mas usual el “no” al trio, en las parejas que piensan en intercambios o en ir a fiestas swingers, en el caso de hombres que de mujeres. Pero el problema es grave sea cualquiera de los dos que en el fondo NO se erotizan con la situacion en si sino que “usan a su pareja como moneda de intercambio”.