Una civilización cuyos valores son tales que un tipo puede ganar 350 millones de dólares en media hora porque hay suficiente gente que paga por ver a dos personas pegarse hasta que uno quede inconsciente es una civilización que merece la autodestrucción que se avecina.
Estamos en la etapa de la caída de la civilización similar al periodo de la caída del imperio romano donde la gente pagaba por ver a los gladiadores matarse entre sí.
Es cierto que desde toda la vida hubo gente con tanta violencia interna que le encantaba ver a otros pelearse entre si y hasta pagaba para verlo.
Pero la diferencia es que ahora la humanidad tiene medios de autodestrucción planetaria (bombas nucleares, guerra bacteriológica, etc etc)
Y la evolución tecnológica avanzó mucho más rápido que la evolución de nuestra moralidad y crecimiento personal (como lo muestra esta atracción por la violencia, en que no parecemos haber evolucionado mucho de dos mil años atrás).
Y esta combinación de armas nucleares con seres humanos de poca evolución humana es como mono con escopeta, en cualquier momento sale el tiro en la dirección equivocada con el sufrimiento consiguiente de alguien.
Y “alguien” aquí, somos tu y yo y nuestras familias.