Muchísima parejas se separan porque se sienten infelices en la vida y no se dan cuenta que se sienten infelices A PESAR de la pareja que tienen y no POR la pareja que tienen. Que si bien su pareja tiene tal y tal defectos el saldo neto de la presencia de esa persona en la vida de uno es positivo, y no negativo.
Y solo lo descubren cuando después de la separación descubren que están PEOR que antes, que los mismos problemas que tenían en la relación anterior vuelven a aparecer en las nuevas porque tienen que ver con subpersonajes nuestros no sanados que actúan de determinada manera o reclutan determinado tipo de personas y luego la provocan y le envían mensajes telepáticos para que actúen de determinada forma y eso los acompaña así se muden de relación o de país o de continente.
Claro está que la mayoría de la gente NO tiene la honestidad de decirse la verdad, la cual queda tapada muchas veces por la dificultad de decirse a uno mismo “me equivoqué”.
Arrepentirse de una decisión que hemos tomado mal duele y la mayoría de la gente evita el arrepentimiento utilizando la capacidad humana de “negación” de la realidad y de “distorsión” de los recuerdos.