En un posteo anterior de el dia de hoy, explicaba como el cerebro emocional hace trampas influyendo en distorsionar el funcionamiento del cerebro racional para que no capte lo que no desea captar de la realidad y así proteja a la persona del dolor de asumir la verdad.
El conjunto de maniobras de trampa que se genera desde el cerebro emocional, se lo llama en psicología “mecanismos de defensa”.
Pesimo nombre, porque la defensa siempre es algo bueno.
Pero en este caso, estos mecanismos no nos defienden de ningún peligro externo real sino que son el producto del miedo al dolor que nos generaría llamar al pan pan y al vino vino con respecto al mundo como es.
Los llamados “mecanismos de defensa” deberían llamarse “mecanismos de automentiras” y siempre que operan generan problemas en nuestra vida, porque así es la mentira, todo tipo de mentira, incluyendo muy especialmente la automentira, es un pase para la disminución de nuestra calidad de vida, y es nuestra total y absoluta responsabilidad poner conciencia para que esto no suceda.