Si viene alguien al consultorio de un psicólogo y le dice “me siento que soy pájaro”, seguramente el psicólogo va a pensar que la persona tiene un problema, porque no es pájaro, por mas que se sienta pájaro.
Si viene alguien al consultorio de un médico y le pide que le ampute un brazo porque se siente manco (dicese manco al que le falta un brazo) y quiere que su cuerpo coincida a como se siente psicologicamente, el médico lo va a derivar al psiquiatra, no al cirujano.
A diferencia de si el pedido es que se le ampute al pene porque “se siente mujer”.
Y en realidad no hay tanta diferencia.
Desde que la famosa escritora y pensadora Simone de Beauvoir, hace ya mas de medio siglo (la pareja de Sartre, el filosofo) dijo su celebre frase “mujer no se nace, se hace”, la ideología de género sostiene que sentirse mujer o sentirse hombre no tienen nada que ver con la biología, o sea si uno nace con determinados órganos, o determinado tipo de secreción de hormonas (ejemplo testosterona versus progesterona) sino que es algo meramente cultural y aprendido y que uno puede ser hombre o mujer “a voluntad” según lo que quiera “hacerse” o lo que “sienta que es”.
Las verdades parciales son las mentiras mas grandes de todas y las mas difíciles de detectar y combatir.
Y ES verdad (solo que parcial) que la identificación en los roles masculino y femenino tienen parte de cultural, o sea que es algo aprendido, de la familia y de la sociedad, y que EN PARTE, la mujer “se hace”, como decía Simone de Beauvoir.
La mentira es creer que una parte es lo mismo que todo y que el hecho de que haya un componente cultural en el sentirse hombre o mujer y sus roles diferenciados masculino y femenino implique que la identificación de género sea SOLO (o preponderantemente) algo cultural.
No lo es, la biología incide aun mas que la cultura, en la mayoría de las personas, en la identificación de género.
Fijate que en países como USA, Inglaterra, Francia, Canada, Alemania, las mujeres son bombardeadas desde la misma infancia con mensajes de “la mujer es igual que el hombre” desde Hollywood, película tras película de mujeres policías, mujeres soldado, mujeres heroínas que salvan a la población luchando contra los malos, etc etc etc y aun con toda la cultura a favor de masculinizar a la mujer, la mayoría de las mujeres del occidente SIGUEN sintiéndose mujeres y femeninas.
Parece ser que aun la mas fuerte y prolongada (ya van dos generaciones) propaganda de género no logra compensar, en la mayoría, cosas como que para tratar de impresionar bien a una prospectiva pareja en una primer cita, la mujer piense en como vestirse linda, en maquillarse, en depilarse, en ir a la peluquería y cosas asi, mientras el hombre prefiere, para impresionar, tener un buen auto (símbolo de poder económico y de eventual capacidad de protección económica futura de la mujer).
Y los cientos de miles de casos que uno puede citar en lo contrario son las excepciones que confirman la regla de miles de millones de los casos que son la regla.
Como en todo, no hay peor ciego que el que no quiere ver y el que está tomado por una ideología (cualquiera de ellas, sea religiosa, política o de genero) mira la realidad a través del cristal deformador de lo que quiere ver y lo que no quiere ver de la realidad que lo rodea.
Chapeau!