El cerebro percibe comparando situaciones.
Por ejemplo si pones tu mano dentro de un tarro de agua helada y luego la pones dentro de un tarro de agua a 35 grados, vas a percibir esa agua como si estuviera mas caliente que si primero la pones en un tarro de agua a 45 grados y luego la pones en ese tarro de agua a 35 grados.
Comparar el actual 35 con el agua helada se percibe como mas caliente que compararla con agua a 45.
El termómetro marcaría 35 en ambas situaciones pero la experiencia de esos 35 grados sería diferente.
Esta percepción y evaluación por comparación no pasa solo en el tema de la temperatura sino en TODO lo que el cerebro evalúa.
Por ejemplo, para que tu cerebro pueda evaluar cuan bien o mal estás en tu vida, necesita comparar con cuan bien o mal están otros en sus vidas.
Por eso los noticieros para conseguir audiencia saben que tienen que pasar las PEORES noticias posibles de las últimas horas para que el televidente disfrute del efecto comparación y terminen sintiendo “mi vida no está tan mal, no me pasa todo ESO que me están mostrando ahí (ese agua esta muucho mas caliente”)
Los noticieros que probaron pasar BUENAS noticias vieron que rápidamente se quedaban con menos y menos audiencia porque a nadie le gusta sentirse mal con su propia vida y si uno compara su vida con las cosas buenas que le pasa a la gente la propia vida se percibe como peor que si la compara con las cosas malas que le pasa a la gente.
Hay otros “noticieros” que tenemos todos los días para ver, fuera de la TV, y es la vida de nuestros hijos.
Nuestros subpersonajes inconscientes se arman esos noticieros con “problemas de otros = hijos y parejas” para sentirse menos mal con los sufrimientos propios.
No lo hacemos oooobviamente de forma consciente, es un proceso inconsciente.
Y esa es la razón porque la tendemos a tomar decisiones de vida cuyo efecto dominó futuro termina siendo que nuestros hijos TAMBIÉN terminen teniendo problemas similares a los que mas nos dolió en nuestra niñez y adolescencia.
Lo podes comprobar haciendote la pregunta: ¿cuales son las tres cosas que mas me dolieron de mi niñez y adolescencia?
Y luego preguntarte si alguno de tus hijos tiene ese mismo “problema” en la vida.
Que casualidad.
POR ESO el famoso Jung dijo una vez que el MEJOR REGALO que le podemos hacer a nuestros hijos, es limpiar nuestra mente inconsciente de las asignaturas pendientes qeneradas por los dolores no elaborados y digeridos de nuestra niñez y adolescencia, para no terminar perpetuando ese mismo tipo de situacion en nuestros hijos (y luego a traves de ellos en nuestros nietos).
Posdata: que yo, YOOOO pueda haber hecho algo que daña a mis hijos? Estas loco???!!? Yo doy la vida por mis hijos!!!
Nadie te lo duda, eso lo haces desde tu conciencia, pero ¿cómo vas a controlar el 95% de los pensamientos y emociones y sentimientos y planes que tu cerebro maneja, que son el inconsciente o sea la parte de tu psique que vos NO SABES que está ahí ni cómo opera?
Por eso el crecimiento personal en general y las psicoterapia en particular consiste en aprender a pasar lo inconsciente a la consciencia. Duele a veces y mucho pero no hay atajos.