Hay mujeres que son maternales en sus relaciones de pareja, y obviamente, atraen a hombres con complejos de “falta de madre” que buscan una pareja “mamá”.
Al principio funciona bien, porque se juntan el hambre y las ganas de comer y una pareja funciona bien cuando dos aspectos se complementan bien uno con el otro.
El problema surge al tiempo.
La mujer maternal con su pareja es maternal porque le tiene miedo al hombre poderoso (seguramente porque vio el poder mal uso por su padre, que lo usó haciendo sufrir con ese poder o a su madre o a ella o a ambas).
Y de ahí sacó la conclusión de que un hombre con poder = sufrimiento para ella.
De modo que por descarte lo único que le queda es buscar hombres niños.
Con lo cual se siente a salvo.
Por un tiempo.
Porque después se empieza a sentir “sola” en la vida, porque toda hembra necesita un macho (que entre otras cosas tiene la capacidad de proteger a su hembra) y un hombre niño no es un macho, es un niño que nunca terminó de madurar y por lo tanto ni tiene responsabilidad ni la desea, ni tiene la capacidad de proteger a ninguna mujer sino que busca la protección y cuidados de “mami”.
Ahi la mujer empieza a sentir que hizo mal negocio.
Ahi empiezan los problemas.
Que terminan en frustración, infidelidad o divorcio.
Posdata: uno diria “todo se soluciona con terapia”. No, hay cosas muy grabadas a fuego en la psique de la gente. Ademas, para cuando te das cuenta, podes tener tanta vida ya “jugada” que los cambios pueden ser muuuy costosos. Aun asi, en la práctica, muchas mujeres maternales llega un momento, tipicamente a la edad de 45, por ahi, que sienten “es ahora o nunca” o se divorcian de su hombre niño para ver si la vida les depara un hombre-macho con el cual puedan ser mas felices.
A veces lo encuentran y a veces no.