Hay tantas cosas en que uno puede pensar que 24 horas por dia no alcanzan para que el que es intelectualmente curioso.
Pero no todas las cosas en la que podemos invertir el tiempo son igualmente utiles.
El que sigue es un posteo “dificil”.
Y te aseguro que cada segundo que pases en leerlo y en releerlo y en releerlo hasta entenderlo, habrá valido la pena.
En el mundo real, el espacio es continuo, como nos enseñaban en el liceo, cuando para definir una recta, nos decían que eran la sucesión de infinitos puntos uno al lado del otro, alineados entre si en una sola dirección.
O sea para llegar desde el punto A al punto B, debías pasar por infinitos puntos intermedios.
En el mundo de las simulaciones por computadora, el espacio, que por ahora con nuestra tecnología es plano (las pantallas), pero que cuando la tecnologia avance lo suficiente sera en 3 dimensiones como lo que se muestra en las peliculas de ciencia ficcion como Matrix, donde uno se puede “meter dentro del juego”, está hecho de pixeles (sea ahora en las pantallas planas o en el futuro en las pantallas en 3D), siendo los pixeles cuadraditos (o cubitos, en el futuro) tan chiquitos que el ojo no los ve separados uno del otro pero que con un microscopio lo ves perfectamente, y cada tantos microsegundos la computadora sabe como iluminar, de que color, cada cuadradito, formando así entre todos los pixeles iluminados, determinada imagen.
Si vos le presentas mas de 24 “cuadros” así por segundo al ojo humano, el cerebro lo ve como “movimiento continuo”, y esa es la base del cine y de la televisión y de los juegos por computadora, la presentación al ojo humano de cuadros sucesivos. Solo que el cine supuestamente saca fotos sucesivas del mundo “real” mientras que la computadora calcula en su cerebro (el hardware de circuitos de la computadora) las sucesivas “fotos a proyectar”.
Lo que vos estas viendo ahora, por ejemplo, mirando la pantalla de tu celular o de tu computadora, tambien son “cuadros sucesivos” proyectados una tras otro tras otro para que tu ojo lo capte como algo “continuo”.
Pero la computadora conectada a tu pantalla (si, si estas usando un celular o un I-pad, dentro de ese aparatito hay una computadora) esta continuamente leyendo la voluntad del operador (vos) viendo si decidió hacer un scroll para abajo, o cambiar de pantalla etc etc, y cuando el operador es el que “juega un juego de computacion”, el programa esta continuamente, entre cuadro y cuadro que calcula, proyecta en la pantalla, calcula, proyecta en la pantalla, incluyendo la voluntad de los jugadores conectados al juego la cual “capta” por medio de las teclas que el operador apriete o lo que haga con el joystick o como sea la interfase entre operador y computadora calculante.
Estos, entre cuadro y cuadro proyectado, pueden haber movido el joystick o apretado una tecla de la computadora, (o en el celular o en el I Pad) y tomando en cuenta las leyes del “juego de realidad virtual” incorporados en la matemática del programa, la computadora “calcula” la ubicación y velocidad de los “objetos dibujados en la pantalla” en el cuadro anterior los cuales sumado a la voluntad de los jugadores que eventualmente estén conectados al juego, lo cual le dá el próximo cuadro a proyectar en la pantalla (hecho como vimos de poner, en cada uno de los pixeles de la pantalla, determinado color, de modo que juntando determinados pixeles, ahí aparece la hoja de un árbol, que sumado a las otras hojas y al tronco dibujado implica la presencia de un “árbol” y así todas las cosas, incluidas las personas que forman parte de la escena).
Tanto mas la “definicion de imagen” de tu celular o de tu computadora, mas chiquititos son los pixeles y mas cantidad de cuadros por segundo calcula y luego proyecta uno tras de otro la computadora.
En la película EL PISO TRECE, el protagonista, que está trabajando en un juego de realidad virtual super avanzado, de tres dimensiones, no uno, y que permite contactar no solo con la vista y el oído, sino con todos los cinco sentidos, se termina “metiendo” en el juego de realidad virtual y en determinado momento de sus salidas y entradas al juego, descubre que su propio mundo es también la realidad virtual de un mundo superior.
Nos da para pensar que nuestro mundo, este que vivís vos y yo, también es un juego de realidad virtual donde los verdaderos vos y yo en realidad estamos en el mundo superior, fuera de la pantalla de la energía y el tiempo, y que dentro de nuestro mundo simulado nos “vemos en el” a imagen y semejanza de los mismos cuerpos que tenemos en el mundo superior, y que así como podemos inventar nosotros dentro de nuestra simulación otra simulación inferior a lo que llamamos nuestros “juegos de computación”, también nuestro Universo es el “juego de computación” de un mundo superior (al que llamamos “el mundo espiritual”). Ahora en esa película se mostraba que dentro del mundo de simulación virtual generado por nosotros en nuestro mundo, ahi las personas podían tomar decisiones que afectaban su destino, o sea habia libre albedrio en todos los niveles del juego.
Ver esa película lleva a la pregunta de “¿somos el mundo real o como muestra esa película, solo un mundo de computación con mayor definición de imagen que los mundos de computación que inventamos dentro de nuestro mundo de computación”?
La respuesta está en si nuestro espacio es “continuo” lleno de infinitos puntos o, como están hechas las pantallas, nuestro espacio, ese dentro y fuera de tu cuerpo, está hecho de “pixeles” o cuadraditos chiquititos, y si el tiempo está hecho de infinitos instantes sucesivos o, como seria en un juego de computación, el tiempo está hecho de “cuadros sucesivos” que se intercalan con momentos de calculo de la computadora.
Un tipo llamado Zenon, genio él, filósofo griego de hace 2500 años, sin tener ni sospecha que algún día inventariamos cosas llamadas computadoras y pantallas, hizo el siguiente razonamiento: si estamos en el punto A y queremos viajar al punto B, primero tenemos que pasar por el punto C intermedio entre A y B, a igual distancia de A y de B, justo en el medio.
Pero por otra parte si queremos viajar de A a C, el punto medio arriba mencionado, también tenemos que pasar por el punto medio de ese tramo, llamemoslo D.
Pero para ir de A a D también tenemos que pasar por el punto medio de ese tramo llamemoslo E.
Y podemos seguir diciendo eso durante infinito tiempo porque en el espacio supuestamente hay infinitos puntos formando una recta.
Pero eso implica que para ir de A a B tenemos que recorrer infinitos puntos lo cual llevaría infinito tiempo lo cual implica que nunca llegaríamos de A a B (el infinito nunca se acaba).
Lo cual es una paradoja porque todos sabemos que podemos “ir” de A a B (caminando, en bicicleta, en auto, en avión, como sea nuestro medio de transporte).
O sea, y ahí viene el punto crucial del razonamiento, si podemos ir de A a B en nuestro mundo es porque NO HAY infinitos puntos sino un numero finito de puntos, entre A y B o sea, que el espacio en el que vivimos es …. pixelado, hecho de pedacitos de espacio uno al lado de otro, igual que las pantallas de nuestras TV Lcd o de las pantallas de nuestras computadoras y de nuestros celulares.
Dos mil quinientos años después, Planck, uno de los genios de la física quantica, incluso pudo calcular …
a) cual es el tamaño de esos cuadraditos chiquitos que son los pixeles del espacio en el que vivimos (se demuestra que no puede existir un espacio mas chiquito que esos pixeles espaciales, y no hay ninguna discusion sobre eso, no es una “opinion de algunos”, es la fisica aceptada por nuestros cientificos desde hace decadas … y
b) cuales son los universoquantas, para llamarlo de alguna manera, o sea cada cuanto la computadora universal (para llamarla de alguna manera) calcula sus cuadros (en los cuales se proyecta tu cuerpo, el mio, la pantalla que estas viendo y las teclas que apreté escribiendo esto)
O sea que la física quantica ha logrado hasta calcular como es la pantalla en la cual vivimos y la definición de imagen del juego de computación generado en la mente de Dios (o computadora universal mística, o dale el nombre que quieras) que conforma lo que creíamos que era el “mundo real”.
Obviamente que si existe un mundo superior (el mundo “espiritual” para llamarlo de alguna manera) y nuestro mundo es un “juego de computacion” dentro de ese mundo, la pregunta que sigue es por que y para que.
Y el buscar las contestaciones a estas preguntas es el puntapié inicial de nuestro crecimiento espiritual.