Cada vez mas el concepto de “me comprometo contigo hasta que la muerte nos separe” se sustituye por “me comprometo contigo hasta que nuestra relación ya no pueda superar los problemas que se presenten”, lo cual lleva a que sea usual tener durante la vida dos o tres o cuatro o mas relaciones monogamas que duran un tiempo, se terminan y luego empieza la siguiente.
Y tiene sentido, en un mundo con personas cada vez mas traumadas (por criarse en familias cada vez mas disfuncionales) que
1) por un lado llevan tantos problemas irresueltos generados en su infancia disfuncional luego al matrimonio, y
2) por otro lado tienen tan alta expectativa de la felicidad que el matrimonio se supone que tendría que darles (porque tantas y tantas películas románticas terminan con el beso final y el vivieron para siempre felices que se insinúa al terminar ahi la película),
que, sumandole a eso
3) la falta de crecimiento personal de la mayoría de la población como para solucionar los problemas que se generan en toda relación humana,
en cinco o diez o quince años terminan con una relación a la que consideran “peor que estar solos” o mas tipicamente “peor de lo que me puedo conseguir como relación de pareja si me quedo solo y busco una nueva pareja”
La monogamia serial tiene como todo en la vida ventajas y desventajas.
La ventaja mas obvia es que te salva de quedar atascado en una relación muy mala por el resto de tu vida.
Las desventajas son:
1) que si uno tiene el atajo de la salida facil, se esfuerza menos en cuidar de su relación y de trabajar por solucionar los problemas cuando se presentan
2) que no es “justo” con las mujeres en el sentido de que el valor de mercado del hombre se mantiene mas tiempo que el de la mujer, porque el factor belleza física, que es una de las cosas que buscan los hombres, disminuye entre los 20 y los 55, mientras que la capacidad intelectual, sabiduría e ingreso económico, que es una de las cosas que buscan las mujeres como forma de “protección”, aumenta entre los 20 y los 55