Hay de dos tipos:
1) La vocación del alma
2) La vocación emocional.
Esta ultima surge de un trauma, por ejemplo, alguien muy cercano se te muere de una enfermedad cuando vos sos chico y desarrollas ahi una vocación por la medicina porque lo que tenes como asignatura pendiente es poder salvar de la enfermedad y la muerte a otras personas ya que esa persona original no pudo ser salvada por vos porque obvio, eras un chico en ese momento.
La vocación emocional es fácil de entender aplicando simplemente el concepto de “asignaturas pendientes” de la psicología.
En cambio la vocación del alma, que no se explica con nada de lo “vivido” por la persona, que parece “nacer con uno”, ya es mas difícil de entender, o quizás imposible de entender, uno puede tener teorías pero no las puede probar.
Ejemplo: yo nací con vocación de aprendizaje y vocación de enseñanza, desde chico era una maquina de aprender cosas, de lo que fuera, de lo mas diverso y pase 30 años como un endemoniado poseido, leyendo y leyendo y aprendiendo y aprendiendo de las cosas mas variadas y a su vez aplicando lo aprendido a áreas de las mas variadas, desde la arquitectura (diseñe y construí mi propia casa de campo, y estoy hablando de una construcción de mil metros cuadrados) hasta la neurociencia (escribí el libro Ingeniería del Alma con mis 21 hipótesis de neurociencia para explicar la psicología a nivel neurocientifico) pasando por la psicología (diseñe mi propio marco teórico que podes encontrar en 7 videolibros aqui http://robertolazar.com/), la ingeniería (me gano la vida diseñando proyectos de ventilación industrial y manejando la empresa en ese rubro) la geopolitica y la espiritualidad vista desde la perspectiva de la física quantica.
¿De donde salio esa pasión por “saber y aprender”?
NI IDEA.
¿De donde me sale la pasión por enseñar a los demás lo que yo aprendí?
NI IDEA.
¿Es bueno tener una fuerte vocación de algo como tuve yo y tantas otras personas, cada cual la suya?
Te lo pongo asi, si te gusta la libertad de poder elegir, la vocación te la quita. No elegís que hacer en tu vida, sos llevado de las narices por tu vocación. De ahí la palabra pasión que tiene la misma raíz etimológica que pasivo, sos pasivo de tu vocación, la pasión te posee y te maneja la vida.
Sin embargo, si pudiera re-elegir mi vida ¿aceptaría mi pasión?
SIN DUDA.
Porque asi como el corazón tiene razones que la mente no entiende, el alma tiene sus razones que si no las seguis, te marchitas.