Quienes en su infancia no fueron bien cuidados (amados), tienden a sabotear las relaciones constructivas

O no “registran” a las personas que podrían ser parejas constructivas que los puedan querer bien.
O los registran pero “no les mueven el piso” como aquellos que son lo PEOR posible para el plan de ser feliz pero son el personaje complementario del juego.
Porque las “atracciones fuertes”, mientras uno no sanó su mente y no neutralizó a sus subpersonajes heridos de la niñez, son aquellos que les sirven para revivir la película de su niñez, sea para justificar a alguno de sus padres o a ambos, sea para cambiar el final de la película y así poder vengarse de papa o de mama o demostrarles QUE tiene que hacer uno/a en una situación similar.
O sea todo mal, porque para ser feliz, uno no tiene que andar con guiones relevantes a la niñez de uno (que son copia o hacer lo opuesto) sino que tiene que ser uno mismo, y dedicarse a ser feliz, no a probarle nada a los padres, no a demostrarles nada, no a vengarse de ellos interposita persona y no reclutar a un cónyuge solo para que algunos años después los hijos que tengamos con el/ella terminen sufriendo lo mismo o peor de lo que sufrimos nosotros, solo que en un caso así tendemos a poner todas las culpas en el “otro/a” o vendernos el buzón de que si eso les falta es por las “circunstancias” que “nos obligan” a hacer X. Solo que si se enfrentan una hora a charlar conmigo, se van a dar cuenta como esas circunstancias fueron RECLUTADAS por determinadas decisiones en el pasado que no se tenían porque haber hecho así, que había perfectas posibilidades de NO haberlas hecho así, y que el cónyuge YA había mostrado la hilacha de determinados defectos que luego sirvieron para romper la pareja “con motivos validos” y que esos defectos fueron parte de la razón del reclutamiento de ESA pareja y de la atracción por ESA pareja porque ESA pareja venia con “garantía de defecto incluido que permitía maximizar la posibilidad de la separación, o de terminar viviendo tal o cual experiencia” que era el OBJETIVO del supbersonaje reclutador.
¿Por que sabotean las relaciones constructivas?
Por dos motivos
1) NO LES SIRVEN PARA JUGAR a los juegos que sus subpersonajes quieren jugar; es como si Caperucita se encontrara con los siete enanitos, no sabría que hacer con ellos, en cambio cuando encuentra un Lobo, ahí si, se le encienden todas las señales internas y algo adentro se siente super atraída por el Lobo. Al punto que no solo se pone a hablar con el sino le dice donde la puede encontrar para comerla (en la casa de la abuela). Después claro se va a quejar con las amigas “no sabes lo que me paso, tengo tanta mala suerte! si no fuera por el leñador todavía estaría con ese hijo de puta de mi ex, el Lobo, en la panza de el”.
2) las personas constructivas LAS SIENTE COMO QUE ESTUVIERAN INSULTANDO a sus padres disfuncionales, porque si alguien puede ser buenos con ella/el, entonces ¿porque papá/mamá no fue bueno/a conmigo?
O sea que alguien pueda ser buenos y constructivos con ellos deja en evidencia las carencias de sus padres lo cual se toma como un insulto.
El subpersonaje “niño herido” prefiere que otro le haga lo mismo malo o dañino con tal de poder justificar a los padres “no es que papá sea malo, todos los hombres son asi” o “no es que mamá sea mala, toda las mujeres son así” entendiendo por “asi” = lo que sea que me hayan hecho que me hizo sufrir (abandono, maltrato, mentira, lo que sea el trauma original)
Vos, ¿estas jugando juegos de guiones de subpersonajes con tu pareja?
¿O tu objetivo real es ser feliz?
¿Reclutaste a tu pareja para que en algunos años tus hijos puedan terminar pasando lo mismo que pasaste vos solo que “obligado por las circunstancias”?
¿O reclutaste a tu pareja para realmente darle una vida contenida y armónica y feliz y sabia a tus hijos?

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