Y es cierto.
Lo sabemos todos aplicado a nuestras propias vidas.
Te doy un ejemplo personal.
En mi relación de pareja con Leticia Castro hubieron mas de una persona que por motivos puramente egoístas algunos, de envidia otras, y/o porque nuestra relación tiraba por tierra viejas creencias disfuncionales que habían manejado la vida de ellos durante mucho tiempo, hicieron cada uno sus “jugadas” (por acción o por omisión) para separarnos.
Lo que no calcularon es que el resultado de esa actitud fue exactamente lo contrario a lo buscado.
Lo que no te mata te fortifica, y cuando te atacan desde afuera te unís adentro para resistir, y nuestra relación floreció y echo raíces ayudado en parte por la “acción en contra” de esas personas (obviamente no voy a mencionar quienes son, pero ellos/as saben quienes son).
Por eso, habiendo llegado a fijar ahora fecha de casamiento, gracias por nada, pero muuuuchas gracias igual a quienes intentaron sabotear nuestra relacion.
La enseñanza de lo vivido es esta: cuando haya gente que nos intenta sabotear alguno de nuestros proyectos de vida, es bueno recordar que podemos siempre usar esta circunstancia no para desanimarnos (siguiéndoles el juego) sino como combustible que eleva la nave de la concreción de nuestros proyectos, y poder así conseguir mas fácilmente (por una decisión interna mas férrea y mas contundente) las metas de nuestra felicidad y autorrealizacion.