Identidad como vestido o como piel

Las personas psicologicamente normales evolucionan en sus vidas, tienen cambios para mejor, aprenden de sus errores, mejoran sus decisiones de vida, maduran.
Pero hay una continuidad en sus vidas.
Yo tengo ya 4 relaciones de pareja serias y comprometidas en mi vida, y cada mujer fue diferente y yo fui en cada relación en algo diferente porque la pareja con la cual te unes forma una especie de reacción química entre ambos, y el efecto es que ni uno ni el otro/a es igual a lo que era en relaciones anteriores.
Pero a pesar de esos cambios hay una clara continuidad de esencia y valores y prioridades y objetivos en mi persona a lo largo de todas esas relaciones y de los periodos de soltería entre ellas, no hay “nuevas vidas” completamente diferentes una de la otra, en cada una de esas relaciones, o en los periodos en que estuve solo sin pareja.
Hay personas con ciertas patologías psicológicas, cuyo síntoma es que cambian radicalmente de tipo de vida y de forma de ser entre distintas etapas de sus vidas (por ejemplo con parejas diferentes).
¿Por qué les pasa eso?
Por que en esas patologias psicológicas no existe en realidad una propia identidad, una propia esencia, sino que se “toma prestada” una identidad en determinado periodo de vida, y ahi es como ponerse un vestido, si te lo pones te lo podes sacar y ponerte otro.
En cambio la genuina “identidad” es como la piel, se podrá ir arrugando, tomando color si estás al sol y luego perderlo, pero tu piel es tu piel, la misma, toda la vida.

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