Hace un rato terminé de ver por TV una película francesa ambientada en Francia entre 1933 y 1939 en el canal Euro.
La agarré empezada.
Una mujer y un hombre casados felizmente.
El unos 38 años, empresario, ella unos 35 muy bonita, pintora.
Pero la felicidad dura poco.
Ella necesita “excitación” en su vida, dice en un momento de la película.
El por su parte es el típico buen marido, que está hecho de otra madera que un buen amante. Le ofrece seguridad, contención, amor, compañerismo, pero no la “excitación” que ella necesita.
Aparece otro hombre que quiere seducirla, un Don Juan.
La seduce y ella es infiel.
El descubre la infidelidad.
La confronta. ella lo acepta.
Se divorcian, muy a su pesar (de el)
Ella se va con el amante.
El queda devastado, deprimido, no se la puede quitar de la cabeza.
Pasan meses.
Sigue deprimido.
Pasan mas meses.
Sigue deprimido, no se la puede quitar a su ex de la cabeza.
Una chica joven mucho menor que el, de unos 20, está enamorada de el.
Una noche esta joven entra al cuarto del hombre que está acostado con el vestido de su ex al lado en su cama, como diciendo “no la tengo a ella pero al menos tengo su vestido y el olor de ella en su ropa”
La joven lo mira, con una mirada que dice soy tuya
El obsesionado con su ex, le dice, ponete su vestido.
Ella lo hace.
Tienen sexo apasionado.
En la mañana el se despierta y cree ver a su ex porque ve a una mujer con el vestido de su ex puesto.
Pero segundos después se da cuenta que no es, que es la jovencita.
Horrorizado se levanta y se va.
Nadie podrá sustituir a su ex en su corazón.
Averigua que es de la vida de su ex, que se fue a otra ciudad.
Y le dicen que se caso con ese hombre que la sedujo.
Obsesionado va a visitarla.
Se encuentran.
Ella le dice que es profundamente infeliz con su nuevo marido que en cuanto se casaron la empezó a ignorar, que era bueno de amante pero pésimo de marido, que buen marido había sido el.
El le propone que deje a su nuevo marido y vuelva a empezar de cero con el.
Ella no le dice que si pero le da a entender que es posible.
El vuelve a Paris con la depresión levantada y lleno de energías pero al volver su mejor amiga le dice que en esa noche de sexo dejo embarazada a la joven y que lo que corresponde es que se case con la joven.
El dice imposible, estoy enamorado de mi ex mujer quiero empezar de vuelta con ella.
La familia de el lo amenaza con desheredarlo, quiere que se case con la joven y tener un nieto (la ex, la que se había ido con el amante, era estéril, lo que en 1933 era un gran problema, las mujeres TENÍAN que tener hijos)
Por otra parte los padres de el le dicen que lo honorable es casarse con la jovencita que embarazo (estamos en 1933)
El se niega, acepta que lo deshereden pero no va a renunciar a empezar de nuevo con su gran amor. su ex.
Se va.
Llega a su casa. Encuentra una carta bajo la puerta que le dejo el correo.
La levanta y siente el olor del perfume de su ex.
La va a abrir cuando suena el teléfono.
Es su amiga, llorando.
Que paso? pregunta.
Odille (la ex) se suicidó con un disparo en el corazón.
El devastado, abre la carta.
Era una carta de despedida.
Le dice que supo que había dejado embarazada a la joven.
Que podía ser feliz con ella.
Y que ella (Odille) no se sentía capaz de hacerlo feliz porque sabia que era una mujer difícil y complicada.
Que no tenia fuerzas para seguir viviendo.
En la siguiente escena pasan varios años mas y es una escena en 1939, una escena familiar. están hablando de política, de Hitler. de posible guerra.
Y se lo ve a él. con la joven. felices, con su hijo ya de unos 4 años.
Sin embargo en la pared se ve el cuadro principal que hizo Odille, que se lo quedo él, y el queda mirando ese retrato, es “feliz”, pero no la puede olvidar a su ex.
Típica película francesa, sin tiros ni disparos ni efectos especiales.
Pero mostrando una faceta de la vida humana real.
Sacrificios por amor.
O. visto desde la psicología. una border de libro (el caos la normaliza, tendencia al suicidio, infieles seducibles) y un ex de una border que como pasa en la vida de todos los días, hoy lo sabemos, psicología mediante, no se la puede sacar de la cabeza porque las border, al principio de la relación, hacen vivir a su hombre en el Paraíso.
Si hubiera mas buenos psicólogos en el mundo, quizás las Odille de este mundo podrían aprender a amar constructivamente en lugar de hacer este tipo de “sacrificios por amor”.